Our researcher talked about why she considers Chile to be in the worst moment of the pandemic despite the successful vaccination campaign

El 90% del país está bajo una cuarentena estricta. En Santiago no hay clases presenciales y, salvo casos especiales, solo se puede salir a comprar alimentos dos veces por semana con un salvoconducto. La mirada de tres especialistas chilenos en TN.com.ar.
Chile, líder de la campaña de vacunación contra el coronavirus en América Latina y en el podio mundial junto a Israel y el Reino Unido, enfrenta hoy una rara paradoja. Por un lado avanza en forma acelerada en el proceso de inmunización y por el otro atraviesa la etapa más dura de la pandemia.
“We are in the best moment and at the same time in the worst moment”, resumió a TN.com.ar el epidemiólogo y experto en salud pública chileno Juan Carlos Said.
Hoy más del 90% de la población del país, de 19 millones de habitantes, está bajo una cuarentena estricta hace ya casi un mes.
En la región metropolitana de Santiago, donde viven más de 7 millones de personas, hay curfew entre las 21.00 y las 05.00. Las schools operate under virtual modality y se restringieron los safe conduct que se tramitan en una comisaría virtual. Una familia tiene un máximo de dos permisos a la semana para ir a comprar alimentos, medicinas o insumos de primera necesidad, aunque los trabajadores esenciales están autorizados a circular, así como aquellas personas que deben realizar un tratamiento médico.
Se estima que la ocupación de camas en la llamada red integrada que engloba a hospitales públicos y clínicas privadas está ya en el 95%. Los casos de coronavirus este año llegaron a un pico de 9125 por día, aunque el promedio se ubicó en la última semana en torno a los 7.500 contagios diarios con una tendencia a la baja.
Between the dark and the light
En diálogo con este sitio, Said dijo que actualmente “se ha alcanzado worst time in critical bed occupancy con el mayor número de hospitalizados en Unidades de Terapia Intensiva en toda la pandemia”.
“Estamos en el probable pico de la segunda ola. Esos son los aspectos negativos”, indicó.
En contrapartida, el especialista comentó que la vacunación avanza “en forma acelerada y casi el 30% de la población tiene dos dosis de la vacuna”.
“Ellos están inmunizados y se están empezando a ver las primeras señales de esta vacunación, en especial con una caída de contagios en mayores de 60 a 70 años”, enfatizó.
Sin embargo, advirtió que las nuevas cepas de Manaos y el Reino Unido han incrementado el número de casos: “Esta situación está contribuyendo a colapsar el sistema hospitalario, aunque por otro lado se está empezando a ver una mejoría”.
The vaccination campaign
The Chilean immunization process recibió grandes elogios internacionales y a menudo es puesto de example a nivel global.
Said dijo que esto ha sido posible porque el gobierno de Sebastian Piñera pudo “negociar tempranamente con diversos proveedores internacionales” la provisión de sueros.
Hoy Chile inmuniza con la vacuna china Sinovac en el 90% de los casos. El 10% restante corresponde a Pfizer. El gran inconveniente que ha mostrado la campaña es que Chinese serum proved ineffective with a single dose. Esta efectividad está en el orden del 16% según un reciente estudio del Ministerio de Salud.
Hasta esta semana, el 40% de la población había recibido al menos una dosis de algunas de las vacunas y el 28,5 %, dos dosis.
“To cut the contagion a single dose of Sinovac is very low”, indicó el experto.
Por su parte, la epidemióloga chilena y especialista en salud pública Ximena Aguilera, miembro del consejo asesor COVID-19 del ministerio de Salud de Chile, dijo que las vacunas ya están teniendo incidencia en los grupos de adultos mayores.
“Ya se observa el aplanamiento (de la curva) en la incidencia de las personas vacunadas. El tema ahora es que la transmisión se está dando en gente de 20 a 60 años. En la medida en que logremos avanzar con ellos vamos a tener más impacto”, dijo en diálogo con TN.com.ar.
No obstante, señaló que la irrupción de las nuevas variantes de Manaos y del Reino Unido, que ya tienen circulación comunitaria, afectaron en especial “a los grupos más jóvenes”, cuyas hospitalizaciones se extienden más en el tiempo y provocan un mayor estrés en el sistema sanitario.
Aguilera, directora del Centro de Epidemiología y Políticas de Salud (CEPS) de la Facultad de Medicina Clínica Alemana Universidad del Desarrollo, dijo que la avanzada campaña de vacunación comienza a ver sus frutos. “Se ha tendido a ver una pequeña disminución de casos en los últimos días”, afirmó.
Lights and shadows
Catterina Ferreccio, subdirectora del Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDiS) y también miembro del comité asesor COVID-19 del Ministerio de Salud, dijo a TN.com.ar que la lucha contra la pandemia tuvo “luces y sombras” en el país trasandino.
“Por un lado el gobierno puso énfasis en mejorar la infraestructura de los hospitales y obtener vacunas y eso lo ejecutó de manera muy eficiente. Pero nunca se llevó a cabo un proceso de aislamiento de los infectantes, que es la única manera de cortar la transmisión del virus. Tenían la apuesta de lograr una herd immunity. Esa fue la sombra que nos persigue”, indicó.
Y añadió: “Tampoco se cerraron las fronteras cuando se recomendó esa medida porque seguían apostando a la vacuna y a tener los hospitales bajo control. Y ahora están en el país las variantes de Manaos y Reino Unido que afectan a todos los que no están vacunados en grandes cantidades”.
Ferreccio said that all this explains the current epidemic que esperan que empiece a bajar.
When will the pandemic be mastered?
La experta está convencida de que Chile podrá controlar este brote y agregó: “No podemos hablar de dominar el virus en ningún lugar mientras sigamos con esta cantidad de infectados”.
“Los países que han tenido el mayor impacto a nivel mundial han sido los que no han querido hacer traceability. Y los que han tenido less social and economic impact son los que han cerrado la frontera al virus, han aislado a los infecciosos y han permitido que el resto de la población siga sus actividades”, sostuvo.
Aguilera, a su vez, se mostró optimista. “We can have hope. Si la población se sigue vacunando deberíamos tener un efecto, no para controlar totalmente la pandemia, pero sí para bajar la presión sobre la red sanitaria”.
En tanto, Said concluyó: "The situation is going to improve progressively. La pandemia podría estar más controlada alrededor de julio y agosto”.